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jueves, marzo 28, 2024

Presidente de Colombia afirma que hogares pobres subsidian a los más ricos a través de la gasolina.

Gustavo Petro busca reducir la brecha económica en el país.

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha afirmado que los hogares más pobres del país están subsidiando a los más privilegiados a través del precio de la gasolina. En un discurso en Cartagena, Petro explicó que el Gobierno gastó alrededor de 36 billones de pesos el año pasado para cerrar el hueco del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles, lo que significa que los ciudadanos más pobres del país están subsidiando a los más ricos a través del precio de la gasolina.

«Se trata de que el señor que carga bultos, a la señora campesina que siembra papa o el desempleado, incluso, están subsidiando al señor que tiene la Toyota y usa la gasolina para llenar la Toyota», dijo el presidente.

Petro también dijo que se molestó cuando descubrió que ese dinero salió de los dividendos de Ecopetrol y que la decisión había sido tomada por su exministro de Hacienda, José Antonio Campos.

Sin embargo, en el pasado, el propio presidente ha defendido públicamente todas las políticas de su Gobierno para desmontar el subsidio a los precios de la gasolina en Colombia y subir lo que pagan los consumidores.

El nuevo ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, ha declarado que el precio de la gasolina en Colombia debería llegar a unos $16.000, que es el precio internacional en el curso de dos o tres años. Esta medida busca reducir la dependencia del país de la producción de petróleo, y al mismo tiempo, disminuir la brecha entre ricos y pobres en el país.

La idea de aumentar el precio de la gasolina ha generado controversia en Colombia, ya que muchos ciudadanos creen que el aumento podría tener un impacto negativo en la economía del país y en la calidad de vida de las personas más pobres. Sin embargo, el gobierno argumenta que el aumento es necesario para reducir la dependencia del país de la producción de petróleo y para garantizar que los ciudadanos más pobres no sigan subsidiando a los más ricos a través del precio de la gasolina.

En cualquier caso, parece que el debate sobre el precio de la gasolina en Colombia está lejos de terminar, y que el nuevo gobierno tendrá que tomar decisiones difíciles para encontrar el equilibrio adecuado entre el desarrollo económico y la justicia social.

Redacción El Norte Hoy

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