Empresario brasileño reveló pagos para manipular decisiones arbitrales
El escándalo por amaño de partidos en Colombia ha generado gran revuelo en el país, luego de que un empresario brasileño afirmara ante el Senado Federal de Brasil que dos árbitros colombianos estarían trabajando con él en una red ilegal de apuestas deportivas. Esta situación ha encendido las alarmas en el fútbol colombiano, especialmente tras la reciente denuncia de Envigado FC sobre la posible participación de uno de sus jugadores en estas actividades ilícitas.
Declaraciones que involucran a árbitros colombianos
El pasado martes, 8 de octubre, William Rogatto, un empresario brasileño investigado por manipulación y fraude en apuestas deportivas, compareció ante la Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI) del Senado de Brasil. En su testimonio, Rogatto implicó a dos árbitros colombianos, revelando detalles sobre los pagos que se hacían dentro de esta red ilegal.
Según Rogatto, los árbitros involucrados en los partidos de fútbol en Colombia habrían recibido sumas de hasta 50.000 rupias para influir en decisiones arbitrales, como la revisión en el VAR o la sanción de penaltis. “Tengo un video de dos árbitros que trabajaron en Colombia. El árbitro recibirá 6.000 dólares con tu responsabilidad… Por supuesto, le haré un llamamiento: bueno, dale una tarjeta y te daré 50.000 rupias”, afirmó Rogatto durante su declaración.
🚨 TREMENDA REVELACIÓN 🚨
— Alejandro Gamboa (@AlejoGamboaJ_) October 9, 2024
William Rogarte, empresario acusado en Brasil por manejar un esquema ilegal de apuestas deportivas, confesó hoy ante la CPI en el senado de Brasil que hace poco dos árbitros de la primera división en Colombia trabajaron para él, dice que tiene vídeos. pic.twitter.com/DnBMvjCWxd
Envigado denuncia a un jugador por amaño de partidos
Paralelamente, Envigado FC, uno de los equipos de la primera división de Colombia, denunció ante la Fiscalía General a uno de sus jugadores por su presunta participación en el amaño de partidos. El presidente del club, Ramiro Ruiz, expresó su indignación al señalar que se trata de una situación sin precedentes para el equipo antioqueño.
Lea también: Florida continúa en alerta por inundaciones y tornados
“Nunca habíamos enfrentado algo así, pero ahora nos toca hacerlo. No solo lo hemos denunciado ante las autoridades, sino también ante los medios, porque esto no puede seguir contaminando nuestro fútbol”, afirmó Ruiz. Además, mencionó que durante la investigación interna del club se descubrieron evidencias que comprometen a otros jugadores, algunos de los cuales habrían estado involucrados en este tipo de acciones desde hace más de un año.
Esta denuncia ha generado gran preocupación en el fútbol colombiano, ya que el equipo envigadeño, actualmente en la casilla 18 de la tabla del descenso, podría verse afectado en su lucha por no caer a la segunda división. Equipos como Patriotas, Jaguares y Deportivo Cali también se encuentran en situaciones similares, donde el margen de error es mínimo.
Consecuencias para el fútbol colombiano
El escándalo por amaño de partidos no solo afecta la reputación de los árbitros y jugadores implicados, sino que también pone en riesgo la transparencia y el fair play en la liga colombiana. Con Envigado peleando por mantenerse en la primera división y con equipos como Jaguares y Patriotas al borde del descenso, cualquier intento de manipulación de resultados podría alterar de forma grave la integridad de la competición.
Le puede interesar: Rudy Márquez solicita la eutanasia en Colombia
Además, las declaraciones de Rogatto, que sugieren que árbitros colombianos han sido comprados para influir en decisiones clave durante los partidos, obligan a las autoridades deportivas a tomar medidas inmediatas para investigar y sancionar a los responsables. De no hacerlo, la confianza de los aficionados y patrocinadores en el fútbol colombiano podría verse seriamente afectada, especialmente en una liga que está bajo el patrocinio de una casa de apuestas.
Este caso, que apenas comienza a ser investigado, promete ser un tema de gran interés en los próximos días, y su resolución será crucial para el futuro del fútbol colombiano y su credibilidad a nivel internacional.