Según las primeras versiones entregadas por las autoridades. El pequeño perdió la vida luego de que su progenitora, una menor de 14 años, se quedara dormida mientras lo amamantaba. Al parecer, el bebé se broncoaspiró.
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Angustiada, la joven mamá lo llevó hasta la Clínica de la Policía en Real de Minas. A este lugar, el bebé ingresó a las 1:30 de la madrugada. Pero a pesar de que los galenos realizaron maniobras de reanimación, el niño ya no tenía signos vitales.
Como antecedente, el niño habría nacido por cesárea a las 31 semanas de embarazo, es decir de 8 meses de gestación, y permaneció aproximadamente un mes y medio en Unidad de Cuidados Intensivos Pediátrica.
Según el relato de la abuela del niño a las autoridades, su hija se encontraba amamantando al niño y momentos después se percató que se había vomitado, de inmediato lo revisaron y no respiraba, por lo cual lo trasladaron de inmediato al centro médico.
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Esta familia había llegado a Bucaramanga el pasado martes con el fin de llevar al niño a un control, sin embargo, el pequeño se encontraba en buen estado de salud. El CTI realizó la inspección y el levantamiento del cuerpo que fue llevado a Medicina Legal.
