El país se encuentra en alerta debido a los altos precios de la energía en bolsa, alcanzando cifras superiores a $850 kWh en los últimos días. Esta situación ha despertado preocupación entre la población y las autoridades, ya que podría traducirse en un aumento del 10 % en las tarifas de la luz en las próximas semanas. Ante esta situación, se han puesto en marcha diversas medidas para garantizar el suministro de energía y evitar posibles crisis.

Desafíos en los embalses y generación energética

La operadora del Sistema Interconectado Nacional, XM, ha informado que los embalses encargados de suministrar agua para la generación de energía están enfrentando niveles históricamente bajos. A la fecha, el embalse agregado del Sistema se encuentra en un 33,54 % de su volumen útil, registrando mínimos históricos en algunos casos, como el embalse de Guavio con apenas un 7,95 %. Esta situación compromete la capacidad de generación hidroeléctrica del país y aumenta la dependencia de la generación térmica.

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Acciones para garantizar el suministro de energía

Ante la inminente crisis, el Ministerio de Minas y Energía ha anunciado la preparación de dos resoluciones para asegurar la generación de energía térmica y gestionar la exportación de energía hacia Ecuador. Estas medidas incluyen la implementación de incentivos económicos en las facturas de energía, la suspensión temporal de las exportaciones de energía y la activación del Estatuto de Riesgo de Desabastecimiento. Además, se busca promover la venta de energía por parte de grandes consumidores industriales para aumentar la disponibilidad en el mercado interno.

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Llamado a la acción ciudadana

En medio de esta crisis, se hace un llamado a la ciudadanía para que tome medidas que contribuyan a mitigar la amenaza de racionamiento energético. Desde los hogares, cada familia y ciudadano puede hacer su parte para reducir el consumo de energía y utilizarla de manera eficiente. Esta colaboración de todos los sectores de la sociedad es crucial para enfrentar estos desafíos y garantizar un suministro energético estable en el país.

En conclusión, Colombia se enfrenta a una situación crítica en el sector energético, marcada por precios récord y niveles bajos en los embalses. Sin embargo, con medidas adecuadas y la colaboración de la ciudadanía, es posible superar estos desafíos y asegurar un suministro energético confiable y sostenible para todos.