Yeferson Cossio, uno de los creadores de contenido más populares del país, ha cuestionado recientemente a sus seguidores sobre el tipo de contenido que consumen en Internet, instándolos a realizar un cambio. A pesar de su éxito con diez millones de seguidores en Instagram, Cossio ha recibido solicitudes de su comunidad para ofrecer más contenido educativo.
Respondiendo a estas peticiones, Cossio decidió compartir un video titulado «Esterilizamos 300 perros en Armenia». Sin embargo, el video no tuvo la acogida esperada y no logró generar muchos ingresos por su publicación, a diferencia de sus videos de bromas, que suelen ser más populares y monetizables.
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Desde sus Historias de Instagram, Cossio expresó su opinión sobre esta situación: «No quiero quejarme, ni mucho menos, ya que a mí me va bien y sigo la corriente. Pero este es el motivo por el cual los influencers somos considerados ‘idiotas’ y por qué hacemos contenido que no educa, según ustedes. En este video en el que apenas gané 50 dólares, la inversión fue de más de 30 millones de pesos. Fuimos, esterilizamos 300 perros, afortunadamente no lo hice por dinero porque sé que no deja ganancias, pero esta vez quise mostrarlo y educar, ya que piden tanto contenido educativo».
Cossio explicó que el video proporcionaba datos e información valiosa, pero tuvo poca visibilidad y, por lo tanto, no generó ingresos. Además, mencionó que los influencers no producen este tipo de contenido porque no es monetizable, ya que su sustento depende de entretener a la audiencia. Por otro lado, sus videos de bromas son mucho más rentables, llegando a superar los 5 mil dólares en ingresos.
Mientras Yeferson Cossio compartía sus reflexiones, también escribió sobre la imagen y el papel de los influencers en la actualidad. A pesar de sus esfuerzos por ofrecer contenido educativo, la falta de apoyo y monetización de dicho contenido plantea un desafío para los creadores de contenido en línea que desean diversificar su propuesta y satisfacer las demandas de su audiencia.
