Al niño Gabriel Esteban Cubillos Rodríguez, sus familiares lo habían reportado como desaparecido y en las últimas horas autoridades confirmaron que fue hallado muerto dentro de un hotel en el municipio de Melgar.
Todas las sospechas del caso recaen sobre el papá del menor, quien presuntamente lo asesinó y luego le mandó la foto del cadáver a la madre. Todo por una venganza.
Luego de denunciar su desaparición ante la Policía de Tocancipá, Cundinamarca. Los familiares del pequeño dijeron que el papá se lo había llevado a una fiesta y que la vida del niño podría estar en peligro pues había problemas intrafamiliares.
De inmediato, las autoridades activaron la red de búsqueda de desaparecidos, pero la situación tomó otro rumbo, cuando el padre del menor envió una foto a la madre del niño en la que le decía que ya estaba muerto y que lo había asfixiado, agregando la frase: “Ahora sí puedes ser feliz”.
Esta triste y macabra historia, al parecer se trata de una venganza. Gabriel Enrique González, el padre del menor, es un hombre bastante mayor para la mamá del niño, pues tiene 50 años. Siempre buscó regresar con la madre del menor pero nunca superó la separación con la mujer.
El cuerpo de Gabriel Esteban apareció en un hotel de Melgar, Tolima. El papá del pequeño de solo cinco añitos lo habría asesinado y huyó, al menos eso fue lo que él mismo hombre indicó con el mensaje que envió a la mamá del niño.
Las autoridades implementaron el plan candado para buscar al presunto asesino, quien habría salido del hotel cerca de las 7 de la mañana sin dejar rastro. El papá del niño dejó pistas. Según las autoridades en una memoria USB que escondió en el baño de la casa de la mamá del niño había mensajes en los que le reprochaba la manera como había terminado la relación.
También a su propia hermana le pidió que buscara unas cosas que había guardado en una moto. Le dijo que no regresaría. La mujer halló $8 millones, además envió mensajes a la madre del menor diciéndole que ahora ella sí sería feliz con su nueva pareja.
En las últimas horas familiares del implicado, revelaron que el hombre de 50 años, en el pasado, había sufrido trastornos mentales.
