Chocaron con un Poste y Perdieron la Vida
En una trágica mañana de domingo, dos jóvenes perdieron sus vidas en un grave accidente en la carretera entre Santa Rosa de Cabal y Dosquebradas. El incidente ocurrió cerca de las 07:00 am en el sector de La Postrera, en Santa Rosa de Cabal. Según los informes iniciales, el conductor de la motocicleta perdió el control y chocaron con un poste de luz, lo que resultó en un desenlace fatal.
Jóvenes Víctimas de un Desafortunado Suceso
Maicol Steven Muños Ayala, un joven que recientemente había celebrado su graduación de grado once, manejaba la motocicleta en el momento del accidente. Muños Ayala, lamentablemente, perdió la vida en el lugar del siniestro. Por otro lado, Jeison Andrés Arboleda Montoya, el pasajero, sufrió graves lesiones en el cráneo y fue llevado de emergencia al Hospital San Jorge de Pereira. A pesar de los esfuerzos médicos, su muerte se confirmó a las 02:30 pm del mismo día.
Las imágenes compartidas en redes sociales mostraron una escena desgarradora: ambos jóvenes yacían inconscientes, sin cascos de protección, sobre la motocicleta, que quedó atrapada entre una pared y el poste. La placa de la moto, STV 70, fue encontrada en la escena, sumando una capa más de evidencia al trágico evento.
Reacciones y Consecuencias del Trágico Suceso
La noticia del accidente rápidamente se difundió en redes sociales, donde se reveló que Jeison Andrés era padre de un niño pequeño. Su pareja sentimental compartió una conmovedora publicación, prometiendo “luchar por nuestro hijo”. Este mensaje subraya la profunda tragedia y el impacto duradero que este accidente tendrá en las vidas de los seres queridos de las víctimas.
Equipos de emergencia, alertados por una llamada de auxilio, llegaron prontamente al lugar del accidente. A pesar de sus esfuerzos, Maicol Steven ya había fallecido. Este trágico incidente resalta la importancia de la seguridad vial y la necesidad de medidas preventivas para evitar futuros accidentes.
Este lamentable accidente no solo ha dejado un vacío en las familias de los jóvenes, sino también en la comunidad. El dolor y la pérdida resonarán durante mucho tiempo, recordando a todos la fragilidad de la vida y la importancia de cada momento que compartimos con nuestros seres queridos.
