Medidas Preventivas en Riesgo: Cómo Responder ante la Amenaza
El IDEAM ha emitido un alarmante comunicado que resuena en el corazón de Risaralda. Doce municipios, entre los que destacan Dosquebradas, Pereira y Santa Rosa de Cabal, enfrentan una alerta naranja debido a la amenaza real de deslizamientos. Otros, como Apía y La Virginia, se posicionan en alerta amarilla. Este panorama, cargado de incertidumbre, exige una respuesta inmediata de la comunidad y autoridades.
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Atención y prevención: Claves en tiempos de riesgo
Diana Carolina Ramírez Laverde, quien es la Coordinadora Departamental de Gestión del Riesgo de Desastres, emitió una declaración en la que enfatiza la importancia de la participación activa de la comunidad. «Queremos hacer un llamado muy importante a la comunidad, pues nos pueden ayudar en muchas acciones que previenen algunas emergencias», advirtió Ramírez. Las recomendaciones incluyen no arrojar basuras a los registros, abstenerse de realizar paseos fluviales y asegurarse de que los techos, especialmente aquellos hechos con tejas de zinc, estén adecuadamente amarrados. «Los eventos que se presentan con más frecuencia en el departamento son los vendavales», agregó.
Ríos en la mira: Otún y Risaralda
No solo la tierra firme genera preocupaciones. La funcionaria también hizo hincapié en la situación de los ríos de la región. El río Otún ha sido señalado con alerta naranja por la probabilidad de crecientes súbitas. Es crucial que se preste especial atención en municipios como Santa Rosa de Cabal, Dosquebradas, Marsella y Pereira. Paralelamente, el río Risaralda no se queda atrás, siendo reportado en alerta amarilla.
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La Gobernación de Risaralda no ha sido indiferente a esta situación. Se ha emitido un llamado urgente a los organismos de socorro, exhortándolos a monitorear de manera constante los sectores en riesgo. La meta es clara: alertar a las comunidades sobre la posibilidad de emergencias, priorizando la prevención y la seguridad de todos sus habitantes.
La situación actual requiere de la cooperación y solidaridad de todos. Estar informados, seguir las recomendaciones de las autoridades y actuar con precaución son las claves para enfrentar estos riesgos naturales. Es un momento crucial para que la comunidad y las autoridades trabajen mano a mano, con el objetivo primordial de salvaguardar vidas y propiedades en Risaralda.
