El pasado martes 4 de julio, Myriam Álvarez Murillo, una mujer de 72 años, perdió la vida en circunstancias aún por esclarecer. Su cuerpo fue encontrado luego de una aparente caída desde el tercer piso del edificio Torres de San Lorenzo, ubicado en la carrera séptima con calle 34, en Pereira. El suceso, que tuvo lugar alrededor de las 9:50 de la mañana, ha dejado conmocionados a los residentes de la zona.
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Las Circunstancias del Trágico Suceso
La mujer, según informes preliminares, habría caído al vacío y su cuerpo fue hallado sin vida sobre el andén de la carrera octava, cerca de la entrada de la estación Ormaza del Megabús. Rápidamente, los vecinos del sector, alarmados por lo ocurrido, comenzaron a congregarse en la escena del incidente.
Los vecinos reaccionaron prontamente y alertaron al vigilante del edificio, quien confirmó la trágica caída y dio aviso a las autoridades. Minutos después, alrededor de las 10:00 de la mañana, el laboratorio de criminalística de la Sijin se presentó en el lugar para realizar una inspección a la escena y al cadáver.
Investigación en Curso y Conmoción Familiar
Hasta ahora, las autoridades no han logrado determinar con certeza las causas de la caída de Myriam. No se descarta la posibilidad de una caída accidental o de un acto voluntario. Una de las hipótesis que se maneja es que la mujer padecía de depresión. Según el informe policial, Myriam vivía en el apartamento con una hermana, pero al momento del incidente, se encontraba sola.
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Durante el levantamiento del cuerpo, los familiares de la víctima se mostraron consternados por la tragedia. Expresaron su dolor y aseguraron que Myriam era una persona muy querida en la familia. La comunidad y sus seres queridos ahora esperan que las investigaciones avancen rápidamente para esclarecer los hechos y brindar una respuesta certera sobre este trágico incidente.
Este caso ha desatado una ola de especulaciones y temor entre los residentes de Torres de San Lorenzo, a la espera de respuestas definitivas por parte de las autoridades. Mientras tanto, la memoria de Myriam Álvarez vive en la mente de sus seres queridos y de una comunidad que aún lucha por comprender su repentina partida.
