Risaralda lidera en hábitos saludables contra enfermedades no transmisibles.
La adopción de prácticas y estilos de vida saludables puede ser el escudo protector que tanto necesitas contra las enfermedades crónicas no transmisibles. Estudios recientes revelan que este tipo de hábitos previene en un 85% la aparición de afecciones como la diabetes, hipertensión y enfermedades cardiovasculares.
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En medio de una sociedad que avanza a ritmo acelerado, la Secretaría de Salud de Risaralda ha tomado la batuta en la concienciación sobre el cuidado integral de nuestra salud. Esta entidad se une a la Semana de los Hábitos y Estilos de Vida Saludables, una campaña que busca sensibilizar a la población sobre la necesidad de cuidar tanto de la salud física como mental. La idea principal es fomentar la adopción de prácticas que contribuyan a una vida más plena, equilibrada y libre de enfermedades.
La importancia de este llamado radica en las cifras. Enfermedades como la obesidad, diabetes, hipertensión y enfermedad cardiovascular no solo afectan a un gran número de individuos a nivel nacional, sino que también representan la principal causa de muerte a nivel mundial. Es en este contexto donde la prevención juega un papel crucial.
Aura María Sánchez, destacada nutricionista del programa de Enfermedades Crónicas no Transmisibles de la Secretaría, manifestó: «La Semana de los Hábitos y Estilos de Vida Saludables es una oportunidad valiosa para reflexionar sobre nuestros hábitos diarios y tomar medidas concretas hacia una vida más saludable y feliz. No importa en qué punto te encuentres en tu viaje hacia el bienestar, siempre hay espacio para mejorar y crecer».
Recomendaciones para alcanzar un bienestar integral: alimentación equilibrada y actividad física diaria.
Pero, ¿qué comprende un estilo de vida saludable? Más allá de simples acciones, es la constancia y la integración de hábitos que buscan un bienestar no solo físico, sino también mental y emocional. Dentro de estas acciones, es esencial mantener una alimentación equilibrada. Esto se traduce en incrementar el consumo de frutas, granos enteros, verduras, proteínas magras y grasas saludables, y, por supuesto, evitar al máximo los alimentos procesados, ricos en grasas saturadas y azúcares refinados.
No obstante, una vida saludable no se limita solo a la dieta. También es fundamental incorporar cualquier tipo de actividad física a nuestra rutina diaria, al menos 30 minutos. Asimismo, disfrutar de un sueño reparador, abstenerse del consumo de tabaco y alcohol y aprender a gestionar el estrés son claves. Para este último punto, prácticas como el yoga, la meditación y técnicas de control de respiración son aliadas invaluables.
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En definitiva, regalarnos vida es una decisión que está en nuestras manos. Adoptar hábitos y estilos de vida saludables no solo previene enfermedades crónicas, sino que nos invita a disfrutar plenamente cada día. La invitación está hecha, y la Secretaría de Salud de Risaralda te acompaña en este vital camino hacia el bienestar. ¡Únete a este movimiento y regálate vida!
