En el Valle del Cauca durante el 2022 se notificaron 1.595 personas víctimas de violencia sexual, el 49% de ellas, menores entre los 12 y los 17 años, y en el 89% de los casos las víctimas fueron mujeres. En lo corrido de este año, se han notificado 249 casos de violencia sexual.
Con el fin de brindar atención e intervenir oportunamente estos casos, la Secretaría Departamental de Salud recuerda que en el Valle del Cauca se cuenta la Ruta de Atención Integral para Víctimas de Violencia Sexual que ofrece atención por urgencias en las instituciones de salud. Es gratuita y se guarda total confidencialidad. Es una atención integral desde un enfoque de derechos, de género y diferencial.
Ana María Tonuzco, psicóloga de la Secretaría Departamental de Salud, quien hace parte del Curso de Vida de Adulto, Adolescencia y Juventud, explica que desde esta Ruta “lo que hacemos es brindar atenciones que van a reparar la salud física y mental de la víctima, además de activar las rutas de justicia y protección acorde a lo que es de nuestra competencia”. Además, “para este caso tenemos las violencias sexuales que no solo se reduce al acceso carnal, sino que también tenemos otros tipos que son, por ejemplo, los actos sexuales, la explotación sexual comercial y la trata de personas”.
Esta Atención Integral para Víctimas de Violencia Sexual comprende cinco competencias: el abordaje clínico, el médico legal, todo lo que tiene que ver con los proceso de vigilancia de salud pública a través de los diligenciamientos de la ficha 875, que es la que nos va a dar al final todos datos importantes para saber cómo está el departamento en relación a estas violencias, y tenemos las activaciones de la ruta de protección a través de Comisarías de Familia, el ICBF y la activación de ruta de justicia por oficio a través de Fiscalía, detalla Tonuzco.
Cabe recordar que todo tipo de violencia sexual: acceso carnal, acoso sexual, acto sexual; aborto, anticoncepción, desnudez, embarazo o esterilización forzadas; explotación sexual (esclavitud sexual, prostitución ajena y pornografía), mutilación genital, unión servil y violencia obstétrica, siempre se van a constituir como una urgencia en salud, es decir, que pueden acceder inmediatamente a través del servicio de urgencias en cada municipio.
Lo ideal, indica la profesional, es que las víctimas asistan en las 72 horas posteriores al evento de violencia sexual, sin embargo, si asisten después de uno, dos o tres días, incluso años, deben ser atendidas por el sector de urgencias y acceden a la misma Ruta Atención Integral.
“Las atenciones van a estar orientadas a brindar atención por salud mental, a una valoración clínica completa, a realizar unas profilaxis en el caso que se requiera, a exámenes paraclínicos, entre otros”, acota Tonuzco.
Leidy Oliveros Múnera
Periodista Gobernación del Valle
