El Papa Francisco fue hospitalizado en el hospital Gemelli de Roma este miércoles para un «control médico programado», según informó el portavoz del Vaticano, Matteo Bruni, en un comunicado. El sumo pontífice, de 86 años, ya había sido sometido a una operación de colon en el mismo hospital en julio de 2021, tras sufrir un tipo de diverticulitis, una inflamación de las bolsas que se desarrollan en el revestimiento del intestino.
En esa ocasión, Francisco permaneció en el hospital durante 10 días después de la cirugía. Desde entonces, el papa argentino ha sufrido un dolor crónico en la rodilla que lo ha obligado a depender de una silla de ruedas y ha tenido que cancelar o reducir actividades debido al dolor. En una entrevista de julio de 2022, Francisco reconoció que necesitaba reducir la velocidad.
La salud del papa ha sido objeto frecuente de especulaciones. En 2020, se vio afectado por un resfriado que le provocó una tos persistente y una leve fiebre. En 2019, Francisco canceló un retiro espiritual debido a un resfriado. En 2018, sufrió una caída que lo dejó con un hematoma en el rostro y un ojo negro.
A pesar de las dificultades de salud, el Papa Francisco sigue siendo una de las figuras más influyentes del mundo y ha promovido un enfoque de apertura y compasión en la Iglesia Católica. Su hospitalización actual ha sido vista por muchos como una medida preventiva, y se espera que regrese pronto a sus funciones como líder de la Iglesia Católica.
