El gobierno responde rápidamente al desastre provocado por el carro bomba en la zona rural de Jamundí.
Jamundí, Valle del Cauca – En una muestra solidaria y rápida de respuesta gubernamental, las seis familias cuyas viviendas resultaron gravemente dañadas por la explosión de un carro bomba en Potrerito, ya tienen en sus manos los «bonos de arriendo» para ayudarles en este crítico momento, generado por un acto de terrorismo.
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Asistencia gubernamental inmediata
“El mismo sábado se giraron seis auxilios para efectos del canon de arrendamiento para estas familias damnificadas por el carro bomba. Estas familias no podían pasar la noche allí y como lo indicamos en su momento, este es un auxilio que se va a dar de manera continua y en articulación y revisión constante con la Unidad de Gestión del Riesgo y con la Unidad de Víctimas», detalló Camilo Murcia, secretario de Convivencia y Seguridad Ciudadana del Valle.
La colaboración entre la Gobernación del Valle del Cauca y la Alcaldía de Jamundí resultó esencial para agilizar el proceso y garantizar el apoyo a las familias. Ambas instituciones han garantizado que los bonos de arriendo serán proporcionados durante los próximos seis meses, tiempo en el que se espera trabajar conjuntamente con el Ministerio de Vivienda para gestionar los necesarios subsidios de mejoramiento para los inmuebles afectados.
Impacto y consecuencias de la explosión
El devastador acto de violencia no sólo dejó a familias sin un hogar, sino que causó serios daños en infraestructuras públicas. Seis viviendas sufrieron daños severos y, adicionalmente, la fachada de la Subestación de Policía de Potrerito quedó gravemente comprometida. Además de los daños materiales, el incidente dejó un saldo de cinco personas heridas, subrayando aún más la necesidad de una pronta respuesta y asistencia por parte del gobierno.
Para las familias afectadas, este apoyo representa una luz de esperanza en medio de la adversidad. La rapidez con la que se gestionaron y entregaron los bonos de arriendo es un claro indicativo del compromiso del gobierno local y regional por garantizar el bienestar y la seguridad de sus ciudadanos, especialmente en tiempos de crisis.
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La comunidad en general, conmovida por los acontecimientos, espera que se tomen las medidas necesarias para fortalecer la seguridad en la zona y evitar que situaciones como esta se repitan en el futuro. Mientras tanto, la solidaridad y el respaldo a las familias afectadas siguen fluyendo desde distintos sectores, demostrando la resilencia y la unión de los habitantes de Jamundí.
La investigación sobre el carro bomba y sus responsables sigue en marcha, y la comunidad espera justicia. La determinación y el compromiso demostrados por las instituciones involucradas en la ayuda a las familias dan un mensaje claro: Jamundí y el Valle del Cauca no se dejan amedrentar y se levantarán más fuertes ante cualquier adversidad.
